Sección
Internet
Internet
Los comienzos
Las primeras conexiones entre ordenadores se realizaban a través de líneas específicas en las que los datos viajaban de forma ordenada, exclusivamente por ese camino, entre un ordenador y otro.
A mediados de los años 60, en plena guerra fría, la agencia estadounidense ARPA, basándose en experimentos realizados en el Reino Unido y en Francia, comienza la creación de una red de ordenadores militares y de investigación en la que los datos entre los ordenadores no vayan por un solo camino, sino que sean divididos en pequeñas unidades que llegan al ordenador destinatario a través de múltiples caminos y no necesariamente en el mismo orden en el que se enviaron. Esas unidades se denominan paquetes y a las redes de este tipo se las conoce como redes de conmutación de paquetes.
Este sistema resultaba muy interesante para los intereses militares ya que, ante la posible destrucción de un centro intermedio de transmisión, al existir múltiples caminos para los datos, no quedarían interrumpidas las comunicaciones. En 1969 se pone en funcionamiento la primera red de este tipo, ARPANET, interconectando 4 universidades.
La madurez del sistema
Durante los siguientes años, ARPANET va extendiéndose a través de los Estados Unidos, siempre en el ámbito militar y de la investigación. Además amplía los sistemas de transmisión, experimentando con comunicaciones vía satélite, y poco a poco surgen nuevos avances. Así, Ray Tomlinson inventa en 1972 el correo electrónico y en 1974 Robert Kahn y Vinton Cerf diseñan el protocolo que más tarde desembocará en el TCP/IP, el usado actualmente en Internet. A partir de 1973 ARPANET se va internacionalizando poco a poco, realizando la primera conexión extranjera con Londres.
Al margen de ARPANET, surgen por todo el mundo nuevas redes entre particulares o empresas: Telefónica monta en España en 1973 la primera red de conmutación de paquetes de Europa por iniciativa de la banca y sobre ella empezará su andadura la Internet española; France Telecom instala en Francia el Minitel, similar al Teletexto; en 1988 se crea en España IRIS, la red de las universidades y de la investigación nacional; en Estados Unidos comienzan a crearse a principios de los 80 nuevas redes científicas como CSNet o BitNet.
En los años 80 proliferan las BBS (Bulletin Board Systems, o Sistemas de Tablón de Anuncios), ordenadores de particulares a los que se accedía a través de la línea telefónica para dejar mensajes a otros usuarios, compartir programas, etc. Uno de los programas que tuvo más éxito para interconectar BBS’s fue Fido, de Tom Jennings, que dio como resultado FidoNet, la primera gran red internacional de ordenadores personales.
Internet en casa
Desde 1990, fecha de la desaparición de ARPANET, y con el desarrollo por parte de Tim Berners-Lee del World Wide Web (WWW), el número de usuarios de alguno de los servicios que ofrece Internet ha crecido de tal modo que, si en el año 1990 el número de internautas era de menos de 500.000, en 2001 ya se podían contabilizar unos 500 millones en todo el mundo. Esto ha sido posible por el gran esfuerzo de las empresas de telecomunicaciones, que vieron el gran negocio que Internet podría suponer y desarrollaron sistemas basados en fibra óptica y líneas dedicadas de datos, como la RDSI al principio y el cable módem o el ADSL más tarde, de forma que las líneas telefónicas y de información fueran por canales independientes. Aunque estos sistemas se han ido imponiendo de forma desigual en los países occidentales, poco a poco los usuarios domésticos van teniendo acceso rápido a Internet, barato y permanente estén donde estén. Sin embargo, no hay que olvidarse de la enorme fractura entre los países desarrollados y los subdesarrollados que esta revolución traerá consigo: según la ONU, en 1999 menos del 15% de la población mundial representaba más del 88% de los usuarios de Internet.
